emilyDickinson1

Alma en libertad

Ningún cepo puede torturar

Mi alma en libertad,

Pues detrás de este esqueleto mortal

Se teje uno de más valor.

No puedes horadar con un serrucho

Ni traspasar con una cimitarra

Dos cuerpos, por lo tanto perdura,

Amarra uno y el otro vuela libre.

El águila no se despoja

De su nido y, sin embargo,

Gana el cielo

Más fácilmente que tú.

Excepto tú mismo tal vez nadie pueda ser

Tu enemigo,

Cautividad es conciencia

Y también es libertad.

 

Emily Dickinson